Tocaba recoger algunos frutos de invierno. En el pueblo hay un árbol de cakis y es una auténtica preciosidad cuando pierde las hojas y se llena de frutos.
Nunca lo había visto así, ya que sucede en invierno y no solemos ir. Pero este año, menudo descubrimiento¡¡
Los peques como siempre disfrutando de lo lindo de la naturaleza.
Qué fotos más bonitas, me recuerdan a cuándo era pequeña!
ResponderEliminarQué pedazo cosecha!
ResponderEliminara mis tres matrioskas les encantan los cakis y nunca los había visto así en el árbol, me han encantado
ResponderEliminary los críos, qué bien se lo pasan al aire libre ¡viva el pueblo!
besos xxx
kakiak!!ummm, goxoak!!!!!
ResponderEliminarhemendik ere ikusten dira, baina batu barik...pena bat!